Si nos moviera el amor




María se preocupaba en su vida más de amar que de comprender;
amaba lo que comprendía y amaba lo que no comprendía;
por sobre todas las cosas, ella amaba
y todo lo vivía en la dimensión del amor.


¡Qué distinta sería nuestra vida cristiana
si en todo nos moviera el amor,
si el amor fuera la explicación de nuestras actitudes y reacciones!


¡Cómo progresaríamos en la santidad
si así imitáramos a María!


María, que dijiste: “Hagan lo que Él les diga”,
concédenos docilidad de corazón a las enseñanzas de Jesús.


* P. Alfonso Milagro